lunes, 19 de mayo de 2008

Dos días en la vida

Quizás cuando la semana es para el olvido, el fin de semana parece reivindicarse haciendo que cada minuto sea mejor que el anterior. Como hechizo mágico que termina a las doce de la noche del domingo.
De esta forma podría llegar a la conclusión de que cuando una semana viene portándose como anillo al dedo, el fin de semana convendría quedarse en casa, porque no promete nada bueno. Pero tal vez sea ese mismo encierro casero lo que haga que ese fin de semana se convierta en uno para el olvido.
Por ahora solo puedo decir que estos últimos dos días han sido tan gratificantes que ya ni recuerdo que tuvo de malo vivir del lunes al viernes pasado.

3 comentarios:

Tina dijo...

Qué alegríaaaaaaa!!!! Ud se lo merece CHap!

"Deillll"

unServidor dijo...

O sea: dos días felices vencen a 5 que ya ni recuerdo...
Y así es feliz la semana entera.

Andrea dijo...

Inspirador!
La putaaaaaaaaaaaaa que vale la pena estar vivooooooo!!!!